Quedarte en cama, sin poder trabajar y estar totalmente incapacitado es el panorama que podrías tener sobre la recuperación después de una operación de columna. Y esto es real, pero solo cuando se trata de una cirugía abierta o totalmente tradicional. Cuando hablamos de una de mínima invasión, las cosas son muy distintas.
Además de una menor probabilidad de complicaciones, menos tiempo en la sala de operaciones, poca pérdida de sangre e incisiones de menor tamaño, este tipo de procedimientos también implican una recuperación más corta y fácil.
Actualmente, distintos avances en las técnicas quirúrgicas permiten que las cirugías de mínima invasión obtengan los mismos (o hasta mejores) resultados que una tradicional, aunque con menos dolor y otorgando la posibilidad de enfrentar la recuperación con menos estrés para retomar tu vida lo más pronto posible.
Los tipos de cirugías de mínima invasión
Aunque existen varias técnicas para llevar a cabo un procedimiento de mínima invasión, todas reducen el daño a los músculos debido a las pequeñas incisiones y los instrumentos especializados usados. En general, estas cirugías se emplean para cumplir dos objetivos: descompresión o fusión. Las de descompresión permiten aliviar presión en los nervios espinales, causada por hernias discales, fracturas, estenosis y otras condiciones. Por otro lado, las de fusión se usan para corregir problemas con las vértebras.
¿Qué esperar de la recuperación después de una cirugía de mínima invasión?
- Salida del hospital: dependiendo del procedimiento, podrás caminar por tu cuenta una hora después, o pasar un par de días internado si este fue muy complicado; de cualquier manera, se trata de una estadía bastante más corta que la posterior a una operación tradicional. En algunos casos, los pacientes pueden irse el mismo día.
- Lugar de la incisión: las incisiones realizadas durante cirugías de mínima invasión son significativamente menores que las de las tradicionales. Al ser de tan solo unos milímetros, las cicatrices y la incomodidad serán limitadas. Si bien puedes experimentar demasiada sensibilidad en el área en los días posteriores al procedimiento, esto usualmente se controla con medicamentos. Cerciórate de seguir las indicaciones y estar alerta en caso de señales de infección, como dolor excesivo, hinchazón y fiebre.
- Regreso a la vida normal: el neurocirujano te proporcionará instrucciones específicas sobre lo que puedes hacer y lo que no después de la operación para una mejor sanación. Para muchas cirugías de mínima invasión, seis semanas es el tiempo promedio necesario para retornar a la vida normal por completo; por supuesto, cada caso es diferente. Tomar las medicinas recetadas, hacer los ejercicios recomendados y tener mucha paciencia son la clave.
Una de las razones por las que el tiempo de recuperación después de una cirugía de mínima invasión es reducido es porque, comparada con una cirugía abierta, la de mínima invasión simplemente hace a un lado los músculos que protegen la columna en lugar de quitarlos y volverlos a poner. La poca irritación de los músculos permite que haya poco dolor posoperatorio, lo que brinda la posibilidad de comenzar con el programa de recuperación más rápido.
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Seguimiento
La primera consulta posoperatoria ocurre una o dos semanas después; de esta manera, el neurocirujano podrá monitorear tu progreso. Dependiendo de tu trabajo, podrás volver después de esta visita; pero si este es sumamente demandante, entonces tendrás que esperar más tiempo.
Terapia física
La terapia de recuperación después de una cirugía de mínima invasión puede entrar en acción alrededor de cuatro semanas después de la cirugía. Las sesiones usualmente involucran:
- Ejercicios de estiramiento.
- Ejercicios de fortalecimiento.
- Educación sobre precauciones para un mejor cuidado de la columna.
La vida después de una cirugía de mínima invasión
Tras el periodo de recuperación, podrás gozar de calidad de vida. La ausencia de dolor te permitirá nuevamente estar activo y desenvolverte socialmente sin preocupación alguna. Los pacientes siempre hablan sobre todo lo que han extrañado y que finalmente podrán volver a hacer.
Por supuesto, para saber si eres candidato a una cirugía de mínima invasión como la endoscopía, primero debes hablar con un experto para que evalúe tu caso. En ocasiones, tratamientos no quirúrgicos son posibles para tratar padecimientos específicos.
Referencias: Disc Spine Institute
New Jersey Spinal Medicine and Surgery
Advanced Spine Institute
